Este dispositivo es el encargado de proporcionar energía al
ordenador. Su trabajo consiste en transformar la corriente proveniente
de la red eléctrica (220 voltios o 110 voltios según el país) a las
líneas de tensión de 12, 5 y 3.3 voltios que usa el ordenador. El
formato utilizado actualmente es el ATX de 24 pines.
Hay dos situaciones para reemplazar la fuente de alimentación:
1. Cuando se realiza una actualización general del ordenador.
2. Al diagnosticar que la fuente empieza a mostrar comportamientos erróneos. En éste caso puede llevarla a un centro especializado.
1. Cuando se realiza una actualización general del ordenador.
2. Al diagnosticar que la fuente empieza a mostrar comportamientos erróneos. En éste caso puede llevarla a un centro especializado.
Al realizar una actualización general del ordenador, se va a instalar
un procesador más potente, entonces también se debe cambiar la fuente
de alimentación por una más potente. Por ejemplo, supongamos que tiene
un computador con procesador Pentium 4, tarjeta de video AGP, grabador
CD, los cuales dependen de una fuente de alimentación de 350 watts de
potencia. La actualización a un sistema más rápido que podría ser un
procesador Core 2 Dúo, tarjeta de video PCI-express y grabador de DVD
puede ser demasiado para esta fuente de alimentación. Lo más adecuado es
poner una de por lo menos 500 watts, especialmente si tenemos pensado
hacer cambios y mejoras en el futuro, como por ejemplo instalar una
tarjeta de video o de sonido de última generación.
Hay que recordar que los procesadores actuales tienen un mayor
consumo de energía. Algo parecido ocurre con las tarjetas de video que
utilizan buena parte de los watts, proporcionados de la fuente. Por ésto
mismo necesitará más energía disponible de los que su ordenador
actualmente utiliza.
Importante: Se podría preguntar si demasiada potencia quemaría algo.
No funciona de esa manera. Si su ordenador requiere 300 watts de una
fuente de alimentación de 450, eso será lo que usará. Los 150 watts
restantes simplemente estarán disponibles por si se necesitan.
La otra circunstancia en la que la gente suele cambiar la fuente de
alimentación, es cuando empieza a mostrar síntomas problemáticos o
simplemente deja de funcionar. Esto suele ocurrir sin avisar. Puede
pasar al pulsar el botón de encendido o en medio de una sesión de
trabajo con el ordenador. Un fallo que puede resultar fatal, es si el
ventilador de la fuente de alimentación deja de funcionar. Si ya de por
sí la fuente se caliente demasiado, perdiendo el ventilador puede
provocar un subida de temperatura peligrosa, el ordenador posee un
sistema de protección para esto; pero podría dañar al mismo.
Para reemplazar la fuente de alimentación nos encontraremos con
varios cables que nos pueden parecer complicados de conectar. La ventaja
es que estos conectores pueden intercambiarse entre los diferentes
dispositivos, y funcionará de la misma manera. Son compatibles con
cualquier elemento: disco duro, DVD, etc. El conector que va insertado
en la motherboard es único y no hay posibilidad de equivocarse. El
proceso es simple:
- Desconecte el ordenador de la toma eléctrica y abra la caja o carcasa del ordenador.
- A continuación, desconecte todos los cables que salen de la fuente de alimentación.
- Retire los cuatro tornillos que sujetan la fuente dañada.
- Retire la fuente e inserte en su lugar la nueva fuente.
- Una vez atornillada, conecte de nuevo los cables.
- A continuación podrá cerrar la caja y encender de nuevo del ordenador.
- A continuación, desconecte todos los cables que salen de la fuente de alimentación.
- Retire los cuatro tornillos que sujetan la fuente dañada.
- Retire la fuente e inserte en su lugar la nueva fuente.
- Una vez atornillada, conecte de nuevo los cables.
- A continuación podrá cerrar la caja y encender de nuevo del ordenador.
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